sábado, febrero 02, 2008

De la justicia mexicana y cosas peores...

Hace 3 meses un amigo y yo sufrimos la policía tlaxcalteca. Fue un episodio que no me gusta recordar, me gustaría decir que aprendí pero la verdad si descubrí algo nuevo fue marginal y no es significativo.

El asunto es que meses después me llego un citatorio para ir a ratificar mi declaración. Y además la respuesta de la policía más que ayudar a esclarecer el asunto insinúa que hice cosas malas [además de negarlo todo; faltaba más].

Espero que el asunto llegue a resolverse algún día... lo dudo mucho.

Una muestra más de sus [y nuestras también] acciones deshonestas:

Negociando una mordida