sábado, marzo 29, 2008

Decidieron casarse...

Hace rato un amigo me previno al avisarme que se casaría al final del mes.

Así que después de un breve mensaje para decirme el lugar y las horas, de la misa (no imagino que motu propio se casara religiosamente) y de la fiesta. Salí de la ciudad hacia el gran rancho que se llama ciudad y corona con la etiqueta de "capital".

Me vestí de traje, compre un regalo (ando bien bruja pero me alcanzo para algo); llegue a comer y de ahí fui a la iglesia donde se efectuaría la misa. El lugar era pequeño pero bonito.

Me encontré a los amigos de mi amigo. Hay uno de sangre muy pesada, que es tolerable pero que no respeto. Además de aquella fauna me reuní con otras personas que quiero, fue un placer verlos e intercambiar algunas palabras. De ahí salimos a la "ceremonia" civil en la casa remodelada de los padres de mi amigo. Algunos años pasaron desde la última vez que estuve en ese hogar.

Luego la fiesta. Le llame a una amiga para que me acompañara pues no sabia si habría alguien con quien pudiera entretenerme al menos. Resultó que un conocido llevo a su hermana. Una chica que se me hizo muy linda, simpática y además con un buen nivel de plática. Al menos mi amiga me ayudó a mejorar mis habilidades dancisticas (sic). Había otra chica muy guapa en el lugar.

Conozco (dentro de lo que cabe) a los dos novios. Descubrí que saber que se casarían y verlos hacerlo me produjo una sensación de bienestar que no esperaba. Puedo decir que me sentí feliz por ellos. Fue un gran día para mí y decidí terminarlo poco antes de ver el amanecer.

A mis amigos les deseo muchos días felices.

miércoles, marzo 12, 2008

...y desperté

Llevo tanto tiempo viendo lo mismo: una pequeña elevación al frente, el pizarrón, la pared de ladrillos y la mesa para los maestros. Sin embargo el sitio esta vacío, más bien prácticamente vacío. Puedo ver un par de compañeros en su butaca, parece que escriben algo.

Entonces la escucho. Dice mi nombre... suena tan extraño. ¿Me llama? Típico, me pregunta algo. Lo raro es que me pregunta donde podría vivir mejor. ¿Acaso sugiere que será con uno de ellos?

Respondo lo de siempre: Qué es lo que quieres, qué es lo que esperas... básicamente "depende de ti". Siempre de ella. Ello me dejaba en la impotencia absoluta, es decir me sumía en la inacción. Siempre espere que me eligiera a mi, no que sólo pasara el tiempo conmigo.

Mi respuesta verbal es típica, incluso la lógica de mi contestación lo es. De alguna manera articulo la idea en una frase corta, con tantas palabras que me sobran dedos para representarlas.

Los gestos... mi comunicación no verbal es inusual, extraordinaria. La sujeto abrazando su cintura y estoy arrodillado. La sujeto con decisión, no quiero apartarme. No otra vez, nunca jamás.

Un momento. Esos compañeros son de la secundaria, inclusive traen el uniforme verde. Ella viste el uniforme de la prepa, no su versión de pantalón sino la falda. ¿Qué hacen ellos en el salón?

¡Qué hago yo en este salón!, ¿cuánto tiempo ha pasado? No más de 30 segundos.

Despierto como en las películas: Súbitamente. Me siento, estoy sudando y completamente alerta. Paso mucho tiempo desde la pasada visita de mi fantasma favorito.

Esto es sorpresa pura pero ¿existe ese anhelo aún? y las preguntas de siempre ¿donde está y qué hace?